Aunque las altas temperaturas han hecho ya su aparición, la inauguración oficial del verano tendrá lugar el próximo 21 de Junio. Piscina, playa, tardes al sol y comidas al aire libre. ¿Quién puede resistirse a los encantos de la época estival?
Con la llegada del verano realizamos más actividades al aire libre de lo habitual, esto sumado a las altas temperaturas características de esta época del año hace que tengamos que tengamos que tomar algunas precauciones si queremos disfrutar de todo lo positivo de esta época sin poner en riesgo nuestro estado de salud, especialmente si estás embarazada.
La piel es más sensible durante el embarazo, por lo que se recomienda un factor de protección alto especialmente en el rostro, ya que el sol puede oscurecer los cambios de pigmentación y fomentar la aparición de manchas marrones en frente, pómulos y contorno de la boca propias de la gestación y que se conocen como cloasma o máscara del embarazo. Es frecuente también durante el embarazo que algunas mujeres presenten hipotensión o bajada de la tensión arterial. Si a esto le añadimos temperaturas elevadas en ciertos momentos del día, es posible que estos episodios sean más frecuentes o incluso más intensos, acompañados en ocasiones de mareo o pérdida de conciencia, es por ello que se recomienda evitar la exposición en las horas más centrales del día.
Una correcta hidratación durante el embarazo es fundamental. Asegúrate de realizar un adecuado aporte de líquidos, para ello bebe agua de forma frecuente durante todo el día y recurre a alimentos refrescantes y con alto contenido en agua (sandía, piña, pepino, tomate, sopas frías…) La hidratación ayuda además a prevenir la hinchazón de pies y piernas, el estreñimiento y las infecciones de orina síntomas todos muy frecuentes durante el embarazo.
En verano solemos modificar un poco la dieta, resultan más apetecible los platos más ligeros por lo que se incrementa la ingesta de ensaladas, frutas y verduras. Esto además ayuda a controlar mejor el peso durante el embarazo.
En esta época debes prestar especial atención a tu alimentación dado que aumentan las posibilidades de intoxicación alimentaria. La comida fresca y recién elaborada se convierten en la mejor opción, descarta todos aquellos alimentos que sospeches que puedan estar en mal estado de conservación.
Durante el embarazo, y más especialmente hacia el final de la gestación, es frecuente que sufras retención de líquidos lo que conlleva síntomas como sensación de pesadez en el cuerpo, cansancio y el síntoma más claro, piernas hinchadas. Esta molestia suele incrementarse al final del día, así como en el verano debido a las altas temperaturas que propician la hinchazón. Se recomienda elevar las piernas, los masajes en sentido ascendente, evitar permanecer mucho tiempo en la misma posición y la ropa apretada.
En esta época del año estos molestos visitantes suelen sentir especial atracción por las embarazadas que se convierten en su blanco favorito debido al aumento de la secreción de estrógenos y estriol, hormonas que los atrae especialmente. Teniendo en cuenta que los mosquitos son transmisores de muchas enfermedades, debes tener especial cuidado y protegerte contra sus picaduras. Utiliza repelente de mosquitos aptos para embarazadas y trata de cubrirte los brazos y las piernas cuando vayas a estar al aire libre en alguna zona con muchos de estos molestos insectos.
El embarazo no te priva de que puedas disfrutar del verano. Organiza bien tu viaje y consulta las limitaciones de las compañías en cuanto al límite de las semanas de gestación para viajar. Si te decantas por el coche, realiza paradas frecuentes para caminar y no olvides hidratarte correctamente durante el viaje.
El último consejo, y no por ello el menos importante, disfruta y aprovecha el verano para descansar, relajarte y prepararte para la llegada de tu bebé. Todos los profesionales que integran la Unidad de Ginecología de HLA Vistahermosa estamos a tu disposición para aclarar cualquier posible duda o problema que te pueda surgir.